jueves, 8 de marzo de 2012

El guerrero, la muerte, el paraíso.

¿Por qué buscar el final de la vida, si podemos morir con cada puesta de sol y renacer con cada amanecer?

Así es, cada día, cada hora, cada minuto, son nuevas vidas, en las cuales nosotros somos autores y protagonistas. Cada segundo que pasa puede ser crucial en tu vida para empezar un nuevo camino, para dejar el camino pedregoso atrás y convertirlo en aprendizaje. Todos pueden rehacer su vida, todos quiénes se atrevan, los que dejan atrás sus temores y arriesgan para conseguir lo que sueñan. Nunca es tarde.

Si mueres cada noche, no sabes lo que habrá al otro día, cada vez que algo bueno suceda, será maravilloso, porque no esperas que esté ahí, simplemente lo disfrutas, por el contrario, cada vez que algo malo suceda, te producirá la pena correspondiente, pero no una frustración porque esperabas algo que no sucedió, o salió mal. Si mueres cada noche, serás un guerrero que está preparado para la muerte, estás desapegado de las cosas, no tienes miedo, que es el principal problema del hombre actual, su motor es el miedo, incluso sus relaciones de pareja giran en torno al miedo, cuando no tienes miedos, giras en torno al amor, al aprendizaje, a la danza del espíritu, todo lo que te suceda es una bendición que te hace más fuerte.

"La llamaré para asegurarme que no esté con otro" - En vez de para alegrarle el día.
"Si no llamo a mi mamá, se enojará" - En vez de para saber como está.
"Me confieso para no irme al infierno", "No sé si creo en Dios, pero en caso de que exista, le seré fiel" - No te mueve el amor, te mueve el miedo, incluso en la forma de pensar.

El que no arriesga no cruza el río, el guerrero no teme a caerse y si muere, será con valentía, pero por el simple hecho de ser tan seguro de si mismo, mientras leías mis palabras el ha cruzado mares.

Si mueres cada noche, cada día darás las gracias por estar vivo, te preocuparás de sentir las cosas en vez de hacer tu vida una rutina, por fin comenzarás a vivir y notarás los detalles que hacen la vida maravillosa y que no se pueden ver a simple vista. El guerrero no es quién asesina por su país, es quién lucha contra sus propios miedos, los vence y tiene una vida plena. Tú, tienes todo para ser un guerrero.

1 comentario: